Embajada de Moros y Cristianos y batalla final es el acto más importante de estas fiestas, que congregaron este año a cientos de archeneros en la representación teatral amateur, donde los embajadores moro y cristiano (Jesús Campuzano de la kábila Abbasíes, encarnó al moro, y Alberto Romero, al cristiano) cobran protagonismo y que sirvió de clausura de estos festejos.
Tras el simulacro de batalla final entre moros y cristianos, la bandera oficial de las fiestas vuelve al poder cristiano, cuyo embajador la entregó en acto solemne y oficial a la Patrona, la Virgen de la Salud, que la mantendrá en su poder hasta el inicio de las próximas fiestas, en 2024, en el acto de la 'Arrancá'.